
En 1989 un antiguo combatiente de la resistencia deportado ofreció una exposición sobre la Segunda Guerra Mundial. Así nació el Museo de la Resistencia y la Deportación, dedicado al conflicto de 1939-1945 en Francia, pero también en Montauban y el departamento. En 2014 el museo evoluciona con una nueva escenografía y se abre a los conflictos de los siglos XX y XXI, dentro del Pôle Mémoire.