Los días 25, 26 y 27 de julio de 2025,las orillas del Aveyron à Cos (municipio de Lamothe-Capdeville) aprenderán a à vibrar al ritmo de un aniversario excepcional. The Rock’N Bike Festival sopla sus 25 velas y promete celebrar este cuarto de siglo con un memorable fin de semana de revoluciones de motores, bailes rockeros y legendaria convivencia. Un acontecimiento único en el Gran Montauban que encarna a la perfección el espíritu de libertad y de compartir de la cultura motera francesa.
Fiesta del motor.


Desde hace 25 años, el Cos Rock’N Bike se ha convertido en una de las citas ineludibles de la cultura motera francesa. Lo que comenzó como una reunión de amigos apasionados se ha convertido en un evento nacional que atrae a visitantes de toda la región. La autenticidad de este evento reside en su capacidad para haber crecido conservando su carácter original: el de una grande fête populaire où mélangent todas las généraciones y todas las pasiones.
Imagínese llegar a Cos en una hermosa mañana de verano. Las gargantas verdes del Aveyron se extienden ante usted, creando un anfiteatro natural de una belleza sorprendente. El murmullo del río se mezcla con el rumor de los motores que convergen desde todas partes, creando una sinfonía única que anuncia tres días excepcionales. Este sitio preparado ofrece un llamativo contraste con la efervescencia del festival. Por un lado, la naturaleza apacible del Aveyron con sus reflejos cambiantes y su exuberante vegetación. Por otro, la deacute;ntica energía de un festival que transforma estas bucólicas orillas en un gigantesco campo de juegos para los amantes de las dos ruedas y del rock.


El espíritu motero en todo su esplendor. Desde las primeras horas, el recinto se transforma en una auténtica enciclopedia motera viviente. Los paseos organizados recorren las pintorescas carreteras del Gran Montauban, ofreciendo a los participantes la oportunidad de descubrir nuestro territorio desde el ángulo privilegiado del motorista. Estas escapadas colectivas crean un vínculo único entre los participantes, unidos por la misma pasión por la carretera y los bellos paisajes.
Las demostraciones de free-style y stunt transforman el espacio en una espectacular arena. Los pilotos superan los límites de las acrobacias en moto ante los gritos de admiración del público. Estos momentos de pura adrenalina se alternan con las presentaciones de la show bike, un auténtico défilé de obras maestras mécanicas donde cada máquina cuenta la historia y la pasión de su propietario. La originalidad ocupa un lugar de honor. Las carreras de tractores cortacésped añaden una nota de humor sucio; que es lo que hace tan encantador al Cos Rock’N Bike. Esta alocada competición, en la que el espíritu cuenta tanto como el rendimiento, ilustra a la perfección la filosofía bondadosa del festival: divertirse por encima de todo.
